Investigan a 43 carabineros por crimen de escolar

La fiscalía ya tiene en su poder los nombres de los funcionarios que estaban en el lugar del baleo.

La Tercera

por Patricio Carrera

Las hojas de ruta y los puntos por donde se desplazaron y estuvieron los funcionarios de la 46° Comisaría de Macul es la primera parte de la investigación que lleva adelante la Fiscalía Metropolitana Oriente para esclarecer el asesinato del estudiante Manuel Gutiérrez Reinoso (16), quien falleció la noche del jueves, mientras presenciaba los incidentes del paro nacional convocado por la CUT.
Se informó que la fiscalía ya tiene en su poder la nómina de los 43 funcionarios que estuvieron en el perímetro donde fue baleado el adolescente. Gran parte pertenece a la dotación de la 46° Comisaría. La investigación se ampliará a la 43° Comisaría de Peñalolén y funcionarios de Fuerzas Especiales.
Gerson Gutiérrez, hermano de la víctima y que estaba con él cuando recibió el disparo, declaró que fueron efectivos policiales quienes abrieron fuego. Sin embargo, la institución ha negado esta versión.
Las armas institucionales y personales de los uniformados están siendo comparadas con el proyectil 9 mm que fue extraído desde el cuerpo del menor. Hasta el sábado, la institución había entregado cerca de 13 armas de ese calibre de funcionarios que estuvieron en el perímetro donde ocurrió el asesinato.
La otra línea de investigación apunta a que los balazos fueron realizados por pandilleros del sector.
Llamado de la familia
Unas 1.200 personas participaron ayer en el funeral del estudiante de enseñanza media. En una ceremonia religiosa, realizada en la iglesia evangélica Simón Bolívar, sus amigos entonaron cantos y se refirieron a la personalidad de Manuel Gutiérrez, conocido como "Manu". Lo describieron como una persona alegre y que quería ser pastor de su iglesia, a la que asistía desde pequeño y donde, incluso, predicó. Estuvieron presentes el alcalde de Macul, Sergio Puyol, y el diputado PC Hugo Gutiérrez.
Claudia Durán, vocera de la familia de la víctima, dijo que "esperamos que no se tome el nombre de él para cosas políticas", añadiendo que el joven no tenía militancia y que esperan que se aclare el asesinato.
Cercanos a la familia relataron que la presidenta de la Fech, Camila Vallejo, y otros dirigentes de la CUT quisieron asistir al funeral, pero los parientes de la víctima manifestaron su negativa, porque no quieren que su deceso sea utilizado por grupos políticos.
Al respecto, la dirigenta dijo que comprendía la situación por la que atraviesa la familia del estudiante.
En el cementerio se hizo presente un grupo de activistas con pancartas alusivas al crimen, culpando a efectivos de Carabineros y lanzando petardos. "El no pertenecía a ninguno de esos grupos", dijo un familiar del estudiante fallecido.

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