Thursday, March 31, 2011

Falleció Víctor Montiglio, el juez que careó a Pinochet con el “Mamo” Contreras

Nación.cl /EFE

Miércoles 30 de marzo de 2011

País


En la tarde del miércoles se produjo el deceso de Víctor Montiglio, integrante de la Corte de Apelaciones de Santiago, quien padecía de un cáncer de páncreas que lo tuvo alejado de sus funciones desde junio del año pasado

A los 66 años de edad dejó de existir el juez y ministro de la Corte de Apelaciones, Víctor Montiglio, producto de un severo cáncer al páncreas que lo aquejaba y que lo mantuvo alejado de sus funciones desde mediados del año pasado.




El magistrado falleció en su hogar junto a su familia. De hecho, hace un par de meses ésta optó porque permaneciera en su hogar y no en un hospital.



Diversas causas de derechos humanos estuvieron a su cargo, tales como las investigaciones por los caso Caravana de la Muerte, Operación Cóndor, Calle Conferencia y Colombo.



En 2009, según un informe de la Corte Suprema, Montiglio, fue el juez que ha dictado más procesamientos contra agentes, militares y civiles involucrados en delitos de lesa humanidad.



El juez, que hasta el 2009 había procesado a 1.328 presuntos responsables de esos y otros casos de violaciones a derechos humanos, ordenó también un careo entre Pinochet y el general Manuel Contreras, el jefe de la DINA (Dirección de Inteligencia Nacional).



Contreras sostuvo entonces (y lo mantiene hasta hoy, cuando acumula sentencias de más de 200 años de prisión tras ser condenado en numerosos juicios) que el verdadero jefe de la DINA era Pinochet y que él sólo obedecía órdenes.



Preguntado por el juez si eso era verdad, Pinochet respondió con una frase peculiar: "No me acuerdo, pero no es cierto. No es cierto, y si fuera cierto, no me acuerdo", dijo.



Montiglio procesó a Pinochet pese a que en 2002 la Corte Suprema lo había declarado "inimputable".



CARAVANA DE LA MUERTE



En noviembre de 2009, cuando el magistrado, que ingresó al Poder Judicial en 1971, tenía en sus manos la investigación Caravana de la Muerte, tomó declaración a Jorge Escalante, periodista que hasta hace un par de meses trabajaba en este medio de comunicación. En la ocasión, Montiglio interrogó a Escalante sobre la conversación que éste tuvo con el -en aquel entonces designado comandante en jefe del Ejército- general Juan Miguel Fuente-Alba en el Club Militar de Lo Curro cuando éste era aún coronel.



Según el periodista, en ese encuentro, Fuente-Alba reconoció, que, efectivamente, era él el subteniente al que se refirió, Pedro Espinoza, como estando presente ese día 19 de octubre de 1973 en el sector Topáter del desierto de Atacama, donde se ejecutaba extrajudicialmente a 26 prisioneros.

 
 
 
______________________________________



Wednesday, March 23, 2011

CARTA DE FAMILIARES DE EJECUTADOS POLITICOS AL SEÑOR PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS

Chile, Santiago, marzo 22 de 2011

Presidente de Estados Unidos



Sr Barack Obama.




Nuestra agrupación de familiares de los detenidos ejecutados y desaparecidos del Palacio de la Moneda y sus alrededores, hace presente a usted en su calidad de Presidente ante su visita a nuestro país, la siguiente demanda de nuestros familiares afectados de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad.


Ha sido demostrado la clara participación de intervencionismo y acciones encubiertas realizadas en Chile en las décadas de 1963 – 1973 y en años siguientes en apoyar la junta militar.

Las actividades clandestinas llevadas a cabo por la CIA, influyeron directamente en proporcionar un ambiente claro y directo hacia el Golpe militar ocurrido el día 11 de septiembre de 1973, como también en apoyar, financiar y accionar todo, sus factores y actores, hasta que se terminó en el Derrocamiento  del gobierno democrático y elegido por nuestro Pueblo.

Hechos que ante la opinión pública son conocidos y acreditados en el hoy de estos casi 37 años en donde poco a poco, se ha ido confirmando y sabemos la verdad tras la desclasificación de los documentos del departamento de inteligencia CIA.

Estos hechos ya acreditados, tuvo efectos directos en nuestras víctimas de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, los cuales fueron prisioneros ejecutados y desaparecidos por el régimen militar impuesto en nuestra nación.

Golpe de estado y Régimen militar el cual, fue apoyado, financiado en acciones encubiertas y todo el aparataje en crear y proporcionar un golpe de estado y que desarrollara el exterminio de todo aquel opositor o movimiento afines de ideas democráticas políticas de izquierda.


Todos estos hechos dieron paso a cada proceso de violaciones de derechos humanos, en los que directamente sufrieron las consecuencias nuestras víctimas y en sus familias, por tanto es nuestra obligación como afectados exigir nuestro derecho, en que Estados Unidos asuma su responsabilidad en estas políticas de intervención que se ejerció en este sentido y la gravedad de sus consecuencias, ya que los actos desarrollados influyeron directamente en los hechos.


Por tanto y oficialmente contando con todos los antecedentes conocidos públicamente al darse a conocer los documentos desclasificados en su parte referidos a la participación directa e indirecta de estas políticas ejercidas por la agencia de la CIA y su gobierno de turno en la época de los hechos, que nos afectaron como familiares, solicitamos oficialmente como organización de los familiares afectados de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, lo siguiente:

1- Que se nos entreguen los documentos desclasificados y se extienda a desclasificar todo lo relacionado a las acciones, que se desarrollaron en este sentido, para lograr esclarecer la verdad y aportar en los procesos judiciales en Chile. Donde aún es materia de investigación judicial, la participación de los autores directos e indirectos en violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, para lograr justicia y no impunidad, logrando avances en los procesos que aún están faltos de verdad y justicia.

2-Que estados Unidos y su departamento de inteligencia CIA, asuma moralmente su grado de responsabilidad en las consecuencias finales de lo que significó estas políticas realizadas en contra del gobierno democrático del Presidente Salvador Allende teniendo como consecuencia final:

Que se llegara al golpe de estado, donde un presidente elegido democráticamente, se le acorralo y ahogo, bajo estas conspiraciones en donde no se escatimó en recursos y apoyos para quienes proporcionaron que se llegara al golpe de estado, donde el Presidente de Chile junto a su equipo de colaboradores directos, fueron objeto del horroroso y dramático proceso, en que se bombardeó el Palacio de la Moneda, con la clara intención de darles muertes en este hecho.

Teniendo como resultado final, el comienzo de los más dolorosos procesos de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, en nuestro país.
Todos los factores y actores deben asumir la gravedad de estos hechos, incluyendo las políticas ejercidas desde Estados Unidos y la CIA, las cuales facilitaron hechos que deben asumirse y las consecuencias de ello, más aun cuando se está hablando de víctimas de procesos que nos marcan.


A casi 37 años, del golpe militar no se logran procesos necesarios y es debido a la falta de verdad y justicia  de los hechos de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, ante lo cual es fundamental para nuestros afectados los procesos judiciales y esclarecer la verdad, dentro de ello está también la responsabilidad que tienen aquellos que provocaron los hechos desde Estados Unidos y como ha sido públicamente reconocido, en los documentos desclasificados, pero nunca se ha asumido frente a la realidad de los familiares de las víctimas de estos procesos, los cuales merecen verdad y justicia.

Verdad que también debe asumir su gobierno ante las consecuencias dejadas de una época en que nos marcó, como latinoamericanos en donde hubo intervención de todo tipo y en todo grado.

Los tiempos de hoy a 37 años del golpe militar en Chile, nos obligan a reconocer y asumir estos hechos en los que debemos realzar, el valioso sentido de la democracia y los derechos humanos, para que las generaciones que vendrán no repita hechos graves de violaciones de derechos humanos y más bien se respeten el derecho de la democracia y los derechos humanos.

3-Asumir es también una forma de pedir perdón al dolor de los afectados provocado por hechos graves que llevaron a los más dolorosos procesos en que cada familia ha debido pasar pero fundamentalmente es pedir perdón a miles de hombres de detenidos ejecutados, desaparecidos, torturados, niños desaparecidos entregados en adopción mientras sus padres fueron ejecutados en dictaduras militares. Dictaduras militares y golpe de estado que fueron producto de políticas ejercidas en un proceso el cual su País y su presidente y el servicio de inteligencia de la cia, fueron participe de forma indirecta y directa, en intervención y brindar todos los recursos para que se facilitara este proceso en que se gestara el golpe militar en Chile.

Ni la modernidad, ni el desarrollo ni el consumismo, lograran cegar u olvidar esta deuda moral que debe y tiene, con este pasado el cual aún sus familiares buscan sus seres queridos en estos hechos de violaciones de derechos humanos de lesa humanidad, dejados por procesos que también involucran su intervención por derrocar el gobierno democrático del Presidente Salvador Allende.

Es por ello que todos deben asumir la verdad y solo ello facilitara la justicia y memoria.

Atte a ustedes


La memoria de nuestros detenidos de Palacio de la Moneda víctimas de violaciones de derechos humanos y nuestra agrupación de familiares.

AGRUPACIÓN DE FAMILIARES DE LOS DETENIDOS EJECUTADOS Y DESAPARECIDOS


DEL EQUIPO DE SEGURIDAD PRESIDENCIAL DEL DOCTOR SALVADOR ALLENDE


GOSSENS (GAP)





_______________________________________________

Tuesday, March 22, 2011

La estrategia de Obama para Chile y América Latina

Por: Andrés Figueroa Cornejo

Fecha de publicación: 22/03/11



“Y no bien amanecía
partió en una nube fría
con su zepelín plateado”
Chico Buarque



1. En entrevista exclusiva para El Mercurio del 20 de marzo, el presidente transitorio del Imperio corporativo de EEUU, Barack Obama, en el marco de su visita a Chile, elogió teatralmente el devenir político, económico y energético del paisito. En el paroxismo de sus febriles declaraciones resaltó los “logros” del territorio más austral del planeta que “Entre esos éxitos también está el hecho de que tenga una democracia vibrante, una economía abierta y una sociedad civil activa”. ¿Una democracia vibrante y una sociedad civil activa? Lo del aperturismo económico es imposición del propio imperialismo para privatizar los antiguos derechos y servicios sociales y apropiarse sin trabas de las riquezas naturales y materias primas de Chile, como ha ocurrido históricamente antes de 1970 y después del golpe de Estado de 1973, y aprovechar las temporales relaciones de fuerza favorables al capital sobre el trabajo, en medio de coberturas legales asociadas a los Tratados de Libre Comercio y a un Código Laboral prácticamente intacto e instaurado a sangre y fuego por la dictadura militar. ¿Pero qué tiene de vibrante una democracia puramente formal, representativa, no participativa y formulada por arriba donde cada tantos años cada vez menos chilenos realizan el trámite de votar por la derecha o la Concertación? En la última elección presidencial, un 40% de la población habilitada para sufragar simplemente no lo hizo. ¿Una sociedad civil activa? ¿Qué significa eso hoy en Chile, además de las resistencias epopéyicas de parte del pueblo nación mapuche, el ambientalismo anticapitalista, un movimiento sindical desarmado y un conjunto de agrupaciones que pugnan por terciar como alternativa política de los intereses de las grandes mayorías? Naturalmente, Obama no se refería a esa sociedad civil ni a esa democracia “vibrante”. Se refería a la gobernabilidad y obsecuencia que los gobiernos civiles de los últimos 20 años han ofrecido al capital, a sus maneras más vanguardistas, financiarizadas, primario exportadoras, sobreexplotadoras de una fuerza de trabajo cada día más precarizada, y a la maximización de beneficios –que también colabora con el dique que contiene la tendencia a la baja de la tasa de ganancia general del capital- mediante la apropiación privada y el saqueo a mansalva de los recursos naturales elementales, como el agua, el mar, la tierra, el aire.



2. Pero lo anterior sólo corresponde a una fracción de los objetivos que tiene el viaje de Obama a Chile. Pese a que Piñera y su esposa tuvieron que cancelar el desayuno que deseaban compartir familiarmente con Barack y Michelle debido a la agenda muy apretada del emperador de turno (el capataz propone, pero el patrón dispone); y la Concertación logró obtener un momento en el programa oficial de la visita por los inmejorables servicios prestados a los intereses del gobierno norteamericano y al tipo de transición sin pueblo y paradigmática desde la dictadura del capital puesta en riesgo por el propio Pinochet, hasta una dictadura del capital con formato electoral tutelado, restringido y excluyente por principio; Obama hizo anuncios relevantes.



Lo inmediato es el impopular y peligrosísimo acuerdo firmado el viernes 18 de marzo entre el ministro de Relaciones Exteriores, Alfredo Moreno, y el embajador estadounidense, Alejandro Wolf, en materia de “cooperación” nuclear. Más allá de la promesa inútil de Piñera de efectuar un seminario en Santiago para “evaluar las conclusiones del convenio” en mayo, donde participará el flamante director de la Comisión Chilena de Energía Nuclear, Jaime Salas, lo cierto es que la catástrofe nipona en curso revela las consecuencias catastróficas que puede tener el empleo de la energía atómica para la humanidad toda. Es decir, no sólo es el peor acuerdo posible, sino que además, se firma en la peor coyuntura posible. Basta enterarse no únicamente de lo que acontece en Japón hoy; también hay que escuchar los planteamientos de la máxima mandataria alemana al respecto. Pero, claro, el desarrollo geométrico de las fuerzas productivas del capitalismo, su voracidad y movimiento ilimitado, ya acabó con el carbón como energía dominante, el petróleo está en vías de extinción, y es la hora de sembrar como hongos apocalípticos centrales nucleares en todo el planeta. La tecnología destacada para América Latina es propiedad de corporaciones norteamericanas; por tanto hay que ingresarla por consenso o fuerza, o de ambas maneras, a los países subdesarrollados del subcontinente, y a espaldas de los intereses y sobrevivencia de los pueblos. Si Japón es una de las cinco economías más desarrolladas del mundo y su población está sufriendo el impacto letal e impredecible de la liberación radioactiva luego del tsunami del 11 de marzo pasado, ¿qué le puede esperar a Chile, territorio de terremotos, maremotos y temblores permanentes, con altísimos niveles de accidentabilidad laboral, improvisación, desregulación en todas las dimensiones industriales, y tercermundista desde que se inventó el término?



3, Por otra parte, Barack Obama –emulando bajo un contexto totalmente otro al asesinado presidente John Kennedy- desea establecer una ‘actualizada’ Alianza Para el Progreso para toda la Región. La original se declaró en marzo de 1961 y duró 10 años. El objetivo esencial en esa época, era contener el ejemplo emancipador de la Revolución Cubana, a través de medidas que buscaban implementar la reforma agraria (proletarización del campesinado y aceleración de la producción agrícola para responder a las demandas de esa fase del capital), libre comercio entre los países latinoamericanos, modernización de la infraestructura de comunicaciones, reforma de los sistemas de impuestos, acceso a la vivienda, mejorar las condiciones sanitarias para elevar la expectativa de vida, mejora en el acceso a la educación y erradicación del analfabetismo, precios estables y control de la inflación y cooperación monetaria. En la realidad, la Alianza Para el Progreso significó profundizar el patrón mono exportador de América Latina, multiplicar la fuerza de trabajo barata, y que el ‘patio trasero’ de Estados Unidos vendiera sus recursos y trabajo a precio módico para comprar al imperialismo mercancías terminadas y caras.



¿Y ahora por qué actualizar esa política? ¿Por los peligros que comportan los gobiernos pro populares y de inspiración antiimperialista de Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua? ¿Para deshacerse de su sobreproducción y sobrecapacidad productiva en ámbitos energético-nucleares, armamentistas y tecnológicos? ¿Para resolver la crisis deficitaria, pública y privada de Estados Unidos, y quemar dólares e instrumentos financieros sin valor en estas tierras, socializando de modo ampliado sus gravísimos aprietos? ¿Para evitar que China y la Unión Europea tomen ventaja sobre las economías latinoamericanas, relativizando aún más su hegemonía mundial? ¿Todas las anteriores?



3. Pasadas las 16:00 hrs., con tres ex presidentes de la Concertación en primera fila (Aylwin, Frei Ruiz-Tagle y Lagos Escobar) y la ausencia de “la preferida”, Michelle Bachelet, quien obtuvo como premio por su administración pro-norteamericana el cargo en la ONU de encargada de ONU Mujeres –mientras espera el momento mejor para lanzar su futura candidatura a la presidencia del 2013-, Barack Obama hizo su alocución llamada “Alianza igualitaria con Latinoamérica”. Antes de ello, en conferencia de prensa con Sebastián Piñera, manifestó que “hay que mirar el futuro”, sorteando con una sola frase la ingerencia política y material probada de los gobiernos pentagonistas en los golpes de Estado, dictaduras, desapariciones, torturas, exilio, asesinatos, preparación de operaciones macabras; desestabilizaciones, crímenes y sabotajes contra gobiernos que incurrieron en el pecado de procurar la autodeterminación e independencia para sus países; y todas las violaciones a los Derechos Humanos imaginables y más, contra los pueblos de América Latina.



Obama destacó el cónclave orquestado entre México, Colombia y Chile en el ámbito de “la seguridad”, entendida como permiso incondicional a la intromisión política y militar del poder estadounidense en sus fronteras, bajo el argumento de la lucha “contra el narcotráfico y el terrorismo”.



“Yo creo que Latinoamérica es más importante para la prosperidad y seguridad de los Estados Unidos que nunca jamás”, dijo Obama, acaso recordando las bases militares bajo su control apostadas en muchos lugares de la Patria Grande, y añadió que “creo que América Latina se va a volver algo más importante para Estados Unidos, especialmente en nuestra economía (…) invertimos más en esta Región que en ningún otro país. Tres veces más a Latinoamérica que a la China.”



Inmediatamente se entregó a una serie de expresiones respecto de una supuesta unidad valórica entre su Estado y Suramérica y el Caribe, por orígenes antiimperialistas y religiosos conectados. Se olvidó Barack Obama de mencionar que ahora él es el representante del imperialismo contemporáneo. “Este es nuestro patrimonio común: somos todos americanos.” Aquí también evitó decir que algunos son más americanos que otros, saltándose las relaciones de dependencia y opresión de larga data del gobierno norteamericano sobre los países del sur del Continente.



Después, el mandamás formal o responsable de relaciones públicas del imperio, se volvió algo emotivo al denotar las desigualdades sociales, la concentración económica y el empobrecimiento que existe en los países al sur de Río Bravo; y referirse al fenómeno –sin explicar de dónde proviene la principal demanda- del narcotráfico y su industria asociada.



Entonces Obama se dedicó a comparar la Alianza Para el Progreso de Kennedy con su actual estrategia, según él, ahora basada en la concepción de “de socios iguales”. El primer pilar de su política sería el combate contra la delincuencia organizada y su peligro para la ‘democracia’. Aquí se extendió sobre Colombia, México y los programas sociales focalizados y asistencialistas. El segundo punto correspondió a la liberación comercial y el aperturismo económico hace rato regente por medio de la multiplicación de TLC’s. Aprovechando la presencia del presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno, Obama habló de ofrecer más créditos para subcontinente. Es decir, ampliar la deuda externa, privada y pública, de América Latina con el BID de capitales estadounidenses. Como era de esperar, abusando de una fraseología respecto de la democracia representativa, disparó contra la isla de Cuba y alabó a las llamadas, ‘damas de blanco’, sin mencionar, por supuesto, el bloqueo económico más cruel y extenso de la historia moderna impuesto sobre un pueblo autónomo, y las innumerables acciones y cifras millonarias para intentar derrocar al gobierno de la Mayor de Las Antillas.



Continuando con un relato extremadamente básico, mediático, publicitario, Obama hizo hincapié aduladoramente en el rescate de los 33 mineros chilenos de una mina en Copiapó, otra vez desmemoriándose de los más de 15 mineros muertos en otros yacimientos y faenas que han ocurrido desde entonces, mientras los medios de comunicación sólo se concentraban en la propaganda gubernamental del salvataje –feliz, pero espectacularizado hasta el hartazgo para su capitalización electoral y las encuestas-.



¿Qué se saca en limpio del discurso del presidente del imperio más poderoso conocido en la historia de la humanidad, el mismo que en tanto intentaba construir una historia editada a conveniencia, mantiene al Oriente Medio subyugado política, militar y económicamente con el fin de hacerse de las reservas petroleras de esa zona; el mismo que apoya con desparpajo y sin vergüenza al gobierno de Israel y sus crímenes en Palestina; el mismo que voltea gobiernos a su antojo, como el hondureño, cuando no le resultan de su gusto e interés?



El mensaje de Obama es claro. La crisis estadounidense debe ser ‘democratizada’ en sus costos por los pueblos de América Latina, y sus ganancias tienen que salvar el pellejo de la ganancia para el Estado corporativo de Norteamérica.



Todas las propuestas ya están concurriendo, pero los intereses urgentes del imperio demandan su mayor profundización por la vía diplomática, legal, política y militar. El imperio requiere superior gobernabilidad para sus inversiones y producción de deuda; mayor control social para el disciplinamiento y súper explotación del trabajo latinoamericano; y un marco jurídico todavía más aperturista para terminar de saquear los recursos naturales de los pueblos indoamericanos y consolidar el momento financiero del capital como dirección superestructural del complejo capitalista general.



Este artículo fue terminado a la 00:01 hrs. del 22 de marzo. En pocas horas, el inquilino de la Casa Blanca emprenderá vuelo de Chile. Queda una estela de demagogia honda y bien estudiada tras su visita. Eso sí, el presente texto habría sido finalizado varias horas antes si quien lo suscribe no hubiera sido detenido junto a nueve personas más en una comisaría de Santiago de Chile, en medio de una marcha pacífica en el centro de la capital del paisito contra la presencia del representante del poder resumido del capitalismo salvaje, a pocas calles donde 500 de los que mandan estaban cenando y celebrando el mensaje aquí comentado.



22 de marzo de 2011



periodistafigueroa@gmail.com



_________________________________